El Principio de Autoridad:
Es de imponer el orden público, frente a la alteración de la paz para la tranquilidad social, e importa el ejercicio del liderazgo de servir como guía de la comunidad; que obliga al funcionario a observar una conducta ejemplar digna de imitar, y fundamentada en la cadena de mando que rige en todo orden de la vida (hogar, escuela, trabajo, etc.); dentro de un sistema piramidal de jerarquía y disciplina, que otorga derecho al superior de ordenar, y deber del inferior a cumplir, dentro de un marco de respeto mutuo, y siempre que el mandato no constituya abierta y groseramente la comisión de un delito, en cuyo supuesto el subordinado esta facultado a desobedecer.- Pero cuando la orden requiera de una profunda elaboración mental para establecer su legitimidad, en virtud al poder de la autoridad, que importa la dificultad del previo análisis, y posterior discusión, es que su cumplimiento esta justificado por la obediencia debida, y la responsabilidad recaerá en quien impartió la misma.-
El Poder de Policía:
Es el empleado como última instancia, agotada todas las medidas previas, cuando el diálogo ya no surte efectos, para llegar al convencimiento a deponer la aptitud, de quien opone resistencia a la orden emanada de la autoridad, en legítimo cumplimiento de su deber, y consistente en la fuerza mínima y necesaria, para doblegar la voluntad del infractor a la ley; mas una vez procedido a su reducción, se deberá hacer cesar, para evitar incurrir en exceso o abuso de autoridad.-
En Conclusión:
Ellos son conceptos que debemos manejar con claridad, por cuanto tienen aplicación práctica en la función de mantener el orden público y, la prevención y represión de los delitos y faltas, siendo que de su conocimiento, podrá depender evitar la frustración de la carrera y ser privado de la libertad.-
Delegación APROPOBA BERNAL, Octubre 13 de 2.011.-
Luis Alberto Colantoni Manuel González Caramés
Comisario (R.A.) Comisario (R.A.)
Presidente Vicepresidente
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